Tuxpan, Ver. a 17 de Diciembre de 2011
Ayer viernes 16 de diciembre comienzan las posadas, una celebración prenavideña que consiste nueve rosarios celebrados en el mes de diciembre, del día 16 al 24, en los que se rememora el viaje de la Sagrada Familia desde Galilea hasta Belén.
Las posadas representan así el peregrinar de San José y la Virgen María a su salida del pueblo Nazaret en camino a Belén para empadronarse en el censo, el cual fue ordenado por César Augusto, y el nacimiento del niño Jesús.
En México se celebran las posadas con gran alegría, entre luces de bengala y con velas en las manos, un grupo de gente que representa a los peregrinos, José y María, piden alojamiento, mientras que otro grupo se encuentra dentro de la casa donde se les podría dar hospedaje y se niega a éste; así realizan, en algunos casos, la visita de las nueve casas, pidiendo la entrada a través de letanías, las cuales finalizan con la aceptación de alojamiento y se deja entrar al grupo que representa a los peregrinos.
Después de ello, se acostumbra tomar el famoso ponche, romper la piñata, y disfrutar de la fiesta. Aunque las posadas son el pretexto excelente para celebrar, sin antes pedir posada, la tradición permanece vigente en el culto de muchos fieles.
La representación del peregrinar de San José y la Virgen María a su salida de Nazaret se conforma de nueve posadas, que inician del 16 de diciembre y consisten en solicitar alojamiento en su camino a Belén hasta el 23 de diciembre, víspera del nacimiento de Jesús.
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